Coexistencia en respeto
En
medio de la indolencia con la madre naturaleza, de la contaminación que asfixia
y colapsa nuestro ecosistema, un periodista de Oro Oro se encontró con esta
imagen que no solo evidencia que podemos coexistir en respeto con
nuestra fauna, sino que además constituye un
ejemplo a seguir. Se trata de doña Leila Ruiz, comerciante que durante años
sale a diario a vender sus preparadas y empanadas al Parque Central los Fundadores
en la ciudad de Granada, Meta, las iguanas han aprendido, tal vez por fuerza de sus
necesidades de existencia a pedirle comida a doña Leila, así como a otros de
sus huéspedes en este parque, bajan de los grandes árboles y como si fueran
animales domesticados, se plantan a pocos centímetros de sus carritos y con
miradas fijas le indican que es hora de sus meriendas, cuenta doña Leila que no
se retiran hasta que se les comparte una empanada o un pastel, que disfrutan
gustosas, en ocasiones se les han trepado a sus vestimentas para hacerse notar; todo esto en medio
de la congestión, de miradas sorprendentes de propios y visitantes.
Buena
esa doña Leila y demás benefactores de
nuestra naturaleza.